Los altavoces inteligentes Echo de Amazon llegan a España y, aunque los Google Home se adelantaron en el estreno, el gigante de Jeff Bezos extiende de esta manera su apuesta por nuevos mercados. Los smart speakers pueden parecer un capricho pasajero en el mundo de la tecnología, pero no lo son ni de lejos: se trata del producto tecnológico con más crecimiento desde la llegada del móvil y estas vertiginosas tasas parece que se van a mantener. Ahora bien ¿qué es un altavoz inteligente y para qué sirve?
Se trata básicamente de altavoces dotados con micrófonos y a su vez conectados a asistentes remotos basados en inteligencia artificial; es como si el asistente de Google o Siri de Apple saltaran al salón o cualquier pieza de la casa y, esto es importante, estuvieran en escucha permanente. ¿Quiere esto decir que los altavoces registran y escuchan todo lo que decimos aunque no estemos interactuando con ellos? La respuesta es no, aunque matizada: estos dispositivos necesitan estar en escucha permanente pero descartan todo el sonido que llega salvo que sea el comando que los activa; una vez llega este comando, entonces sí, envían el audio a los servidores para su procesamiento.
MÁS INFORMACIÓN Una casa ‘manos libres’
Amazon fue al primera compañía en introducir este producto en el mercado y en inaugurar una categoría que hasta entonces no existía. El gigante ha aterrizado en nuestro país con un amplio abanico de modelos con los que cubrir las necesidades de los usuarios con un Echo básico que parte de los 59 euros, un precio de inicio con el que se accede a todo el sistema. Con Google sucede lo mismo y es que su Home Mini parte precisamente de ese mismo precio, pero únicamente cuenta con un modelo superior frente a Amazon, que dispone de un amplio abanico de dispositivos, incluyendo un Echo con pantalla en color que reproduce vídeo.
Con un conjunto de altavoces, la siguiente pregunta que se plantea es: ¿dónde los instalo? Lo cierto es que este tipo de dispositivos solo necesitan un enchufe cerca y basta con conectarlos a través de la aplicación en el móvil para que estén operativos. Así las cosas, lo más lógico es instalarlos en aquellos lugares del hogar más frecuentados, aunque sorprendentemente, en la cocina y el baño pueden resultar extremadamente útiles. Tener la casa cubierta por una red de altavoces inteligentes consigue el efecto ‘manos libres’ para multitud de funciones.
Son útiles y se acostumbra uno a ellos enseguida
Un solo día se necesita para empezar a utilizar de forma cotidiana los altavoces y, lo que resulta más llamativo, para sustituir por completo la forma en la que nos relacionamos con ciertos dispositivos. Pero… ¿para qué son realmente útiles los altavoces? Lo cierto es que este tipo de dispositivos brillan con luz propia cuando sirven de pasarela de activación de otros: así, por ejemplo, si se equipa el hogar con bombillas inteligentes (hoy en día han reducido considerablemente su precio), el encender y apagar de las luces lo haremos enseguida de viva voz. “Alexa, apaga la luz del cuarto”, o bien, “baja la luz”, si lo que queremos es atenuarla. De la misma manera y contando con un termostato conectado, podremos encender o apagar la calefacción desde cualquier punto de la casa y sin mover un dedo.
Los altavoces inteligentes son mucho más útiles a medida que se invierte en otros dispositivos y servicios que se pueden conectar. De esta manera, otra de las funciones más utilizadas y valoradas por los usuarios es la de reproducir música: comandos como “pon música relajante” o “despiértame mañana a las 7 con música de Coldplay” se hacen habituales enseguida, aunque para ello es necesario estar suscrito a un servicio de música en streaming como Spotify o Amazon Music Unlimited. Los altavoces reconocen además los diferentes acentos en España, “Alexa es capaz de entender el gran número de acentos que hay en España. Por ejemplo, un cliente del sur de España va a pronunciar las cosas de forma muy diferente que un cliente del noroeste”, explican desde Amazon España.
Otra función muy interesante consiste en crear las llamadas rutinarias, que son una serie de comandos que se programan desde la aplicación de acciones concatenadas que llevemos a cabo a diario. Así, por ejemplo, tras un “Alexa, buenos días”, el sistema encenderá la luces, nos dará la predicción meteorológica del día, nos hará un resumen de las citas y nos indicará la situación del tráfico que nos encontraremos camino del trabajo; todo ello sin poner un pie fuera de la cama. Recordatorios, creación de citas, consulta de datos… los usos más comunes de los sistemas basados en inteligencia artificial también están más a mano. Por otro lado, estos sistemas basados en inteligencia artificial van aprendiendo con el uso de nuestros hábitos y cada vez son más eficientes.
En definitiva, y sin que uno se dé realmente cuenta de ello, los altavoces inteligentes se convierten en un elemento cotidiano de nuestra vida y sin duda los echaríamos de menos una vez los hemos probado. Por otro lado, los fabricantes han dispuesto el hardware y no cabe duda de que en un futuro se irán incorporando funciones que enriquecerán todavía más su uso con lo que se entiende perfectamente el brutal incremento en las ventas de este tipo de dispositivos.