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El grupo dejará de vender productos locales en sus plataformas del país tras sucumbir a la dura competencia de Alibaba y JD.com Logo de Amazon. Carlos Jasso REUTERS
El gigante del comercio electrónico Amazon anunció este viernes el cierre de algunos de sus servicios en China ante la imposibilidad de competir con las empresas locales. La compañía estadounidense dejará de vender productos procedentes de vendedores locales en su portal en China desde el próximo 18 de julio, día a partir del cual los consumidores en este país solamente verán una selección de lo que se ofrece en la tienda global del grupo. La retirada –aunque parcial- de otro gigante tecnológico extranjero en China subraya las dificultades de estas empresas para hacer frente a sus competidores chinos, en este caso Alibaba y JD.com.
El grupo decide tirar la toalla en una de las divisiones de negocio con más potencial pero donde la competencia es más feroz: la venta al por menor de productos locales. "Estamos trabajando estrechamente con nuestros vendedores para garantizar una transición sin problemas y continuaremos brindando la mejor experiencia posible al cliente. Los vendedores interesados en continuar vendiendo en Amazon fuera de China pueden hacerlo a través de Amazon Global Selling", dijo la empresa en un comunicado en su página web china. Amazon aseguró que sus otras líneas de negocio en el país –el servicio de computación en la nube, la venta de libros electrónicos o el comercio de bienes desde otros países hacia China- seguirán funcionando.
Un negocio ínfimo
Amazon entró en el mercado chino en 2004 tras hacerse con una empresa local de venta de libros a través de Internet. Pese a sus buenos comienzos, la compañía pronto se vio superada por el crecimiento a doble dígito de las compañías locales, más familiarizadas con el patrón y las demandas de los consumidores chinos. Durante sus inicios Amazon fue garantía de productos de calidad, pero las plataformas de Alibaba y JD.com limpiaron rápidamente sus portales de productos malos o falsificados y su rapidez en la entrega condenaron a la firma de Jeff Bezos al ostracismo en este mercado. Según la firma iResearch, mientras Alibaba y JD.com acumulan más del 80% de la cuota de mercado en el país, Amazon apenas alcanza el 1%.
A partir de mediados de julio, la empresa se centrará en vender a China productos de otros países. “En los últimos años hemos estado evolucionando nuestro negocio al por menor en China para enfatizar cada vez más las ventas transfronterizas, y hemos notado una respuesta muy fuerte por parte de los clientes chinos. La demanda de productos auténticos y de alta calidad de todo el mundo continúa creciendo rápidamente y, dada nuestra presencia global, Amazon está bien posicionada para atender a estos consumidores”, aseguró la compañía. Apostar por esta línea de negocio “más lucrativa”, sin embargo, no permitirá a Amazon librarse de la fuerte competencia local, empresas cuyos catálogos de productos internacionales también se han ampliado en los últimos años.
Algunos de los principales gigantes tecnológicos mundiales como Google, Facebook o Netflix tienen un negocio ínfimo en China o incluso no pueden operar en el país porque, de momento, no se han plegado a las exigencias de las autoridades basadas en censurar sus contenidos. Otros como Apple y Microsoft han cosechado un éxito notable tras cumplir con estas leyes. Un tercer grupo, en el que se encuentran Amazon, eBay o Uber, probaron suerte en el mercado chino pero tuvieron que retirarse -o ser absorbidos- ante la imposibilidad de competir contra los grupos locales.