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El argentino responde al volante, que denunció no gozar de las mismas oportunidades que el resto y está prácticamente descartado para el derbi tras retirarse del entrenamiento con unas molestias en la espalda Solari, en el entrenamiento previo al derbi. Fernando Villar EFE
Cuando el caso Isco parecía haberse normalizado en Chamartín, un tuit del jugador malagueño en la tarde del jueves reavivó la polémica. El chico, suplente otra vez en el clásico de Copa disputado en el Camp Nou, donde no disputó ni un minuto, contestó a unas palabras del exjugador del Real Madrid, Rubén de la Red, sobre su situación. El canterano dijo que el club blanco no espera no espera a nadie y el volante alegó que no gozaba de las mismas oportunidades que el resto de sus compañeros. Este viernes, a unas horas de visitar al Atlético en el Wanda, Isco se retiró del entrenamiento alegando unas molestias en la espalda y Solari, siempre comedido en su discurso, le envió un mensaje a su pupilo.
De las 15 preguntas que permitió el departamento de comunicación del club, seis giraron en torno a la denuncia que realizó Isco. El argentino nunca se ha mostrado contundente en sus respuestas sobre la situación del malagueño, pero sí en su postura. Isco es, como mínimo, suplente en su Madrid. Referente para Julen Lopetegui, es el jugador número 21 en minutos con Solari: 189 en LaLiga, 515 en total; con el vasco disputó 664 y el curso pasado el contador se disparó hasta los 1.780 en el torneo doméstico y 2.957 en el global. Por eso, el jugador cree que no se está siendo justo con él.
El entrenador, por el contrario, dejó intuir que su trabajo no es el adecuado. "¿Cree que Isco no goza de las mismas oportunidades que sus compañeros?", le preguntaron a Solari. La respuesta no fue directa, pero sí reveladora: "El trabajo del futbolista profesional es entrenarse al cien por cien para estar al servicio del equipo. El equipo está muy bien. Cada uno de los jugadores está trabajando con muy buena predisposición para ser que el equipo sea protagonista en cada partido", consideró el argentino, que no aclaró si Isco cumple con su labor.
Su réplica desencadenó otra cuestión: "¿Le molesta que Isco mandase ese mensaje que no va en la dirección de que el equipo sea protagonista?". Solari, visiblemente molesto, solo emitió una palabra, suficiente para evidenciar cierto enfado. "Bueno...". Las preguntas continuaron y Solari, con un semblante más serio de lo habitual, se limitó a repetir su mensaje. Le cuestionaron si Isco tenía razón en su denuncia, si en su plantilla todos gozan de las mismas oportunidades y si le perturba que haya un jugador en el vestuario que piense más en sí mismo que en el equipo.
"El fútbol es trabajar y poner el talento al servicio del equipo, entrenar al cien por cien en cada entrenamiento y dar todo. Ese el trabajo para estar disponible para cuando toque jugar. Todos los jugadores están pensando en el equipo e implicados en este momento. Así se percibe. Es lo que se ve en los entrenamientos y en los partidos", espetó.
La presencia de Isco en el derbi está prácticamente descartada. El volante, de 26 años, abandonó el entrenamiento por unas molestias en la espalda. La realidad es que estar en óptimas condiciones tampoco le garantizaba un hueco en la lista de convocados. Vinicius Júnior, Lucas Vázquez, Bale y Asensio están por delante de él en la rotación y Solari debía escoger entre el malagueño o el punta Mariano para completar el banquillo.