España mantiene la amenaza de vetar el Brexit. El Gobierno de Pedro Sánchez considera que, pese a las negociaciones de última hora de este viernes, España sigue sin tener garantías sobre la futura relación de Gibraltar con la UE y tiene la intención de mantener su rechazo al acuerdo del Brexit, que debe aprobarse en una cumbre extraordinaria este domingo en Bruselas. Pedro Sánchez ha despejado esta noche desde La Habana cualquier duda al afirmar que "las garantías no son suficientes y por tanto España mantiene el veto al acuerdo del Brexit".
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Además, ha puesto en duda la celebración del Consejo Europeo del domingo, donde debería ratificarse el acuerdo de salida de Reino Unido. "Si no hay acuerdo, es evidente que lo que va a ocurrir es que el Consejo Europeo [del domingo] muy probablemente no se celebre", ha dicho el presidente al responder a una pregunta sobre si acudirá a dicho encuentro si no logra las garantías que reclama. Enfrascado en una negociación de incierto final, Sánchez no quiso aclarar si es la litreralidad de la última oferta de la UE o su falta de valor jurídico lo que no le convence.
"No tenemos todavía todas las garantías que queremos sobre Gibraltar. No podemos considerar que haya un acuerdo. Tal y como está ahora la situación, se mantiene el veto", aadelantaron desde La Habana fuentes de la delegación que acompaña al presidente Pedro Sánchez. "Es un asunto de interés nacional", indicaron. "El Gobierno anterior no fue lo suficientemente ambicioso en la negociación", añadieron, en referencia al Ejecutivo de Mariano Rajoy.
Aunque el acuerdo del Brexit puede salir adelante con mayoría cualificada de los Veintisiete (con el voto a favor de no menos de 20 países que representen al menos el 65% de la población), el Gobierno considera que "la declaración política" que lo acompaña "requiere unanimidad". "No va a haber un acuerdo a 26, es impensable", han asegurado.
La tajante respuesta del Gobierno de Sánchez llega poco después de que la UE hubiera ofrecido esta mañana una salida a España para evitar su rechazo: sendas declaraciones, tanto por el lado británico como del europeo, para despejar las dudas de España sobre la situación de Gibraltar tras la salida del Reino Unido de la Unión Europea, según ha informado el secretario de Estado para Asuntos Europeos, Marco Aguiriano, tras reunirse con sus homólogos en Bruselas.
Ese documento, del que se desconocen los detalles, intentaba, "cumplir con las exigencias y objetivos del gobierno de España", según explicó el secretario de Estado, Marco Aguiriano, tras reunirse en Bruselas con sus homólogos europeos y con el equipo negociador dirigido por Michel Barnier.
El secretario de Estado aseguraba tras el encuentro que los negociadores "han ido todo lo lejos que pueden ir conforme al derecho comunitario incluso han mejorado el texto que habíamos planteado en cuanto a la declaración política. Lo han reforzado, con más referencias al Tratado de la Unión". Aun así, no ha bastado para tranquilizar a Moncloa y su rechazo deja esta posible salida en el aire.
"Nadie [en la UE] está en contra de nosotros; hemos apoyado a todos los países que han tenido intereses nacionales en juego", según el Gobierno, que consideran que sería positivo que el Consejo Europeo pueda realizarse este domingo, pero "lo que importa no si es ese día o más tarde, sino que haya un acuerdo".
Las objeciones del Gobierno español van ligadas a la escasa relevancia legal de la oferta planteada por Bruselas. El posible acuerdo sobre Gibraltar discutido esta mañana se iba a recoger en una declaración aneja a las conclusiones del Consejo Europeo del próximo domingo.
En el borrador de ese texto adjunto, figuran ya las precisiones reclamadas por otras delegaciones, como las de Francia sobre la prioridad de negociar un acuerdo con pesquero con Londres que garantice el acceso de los barcos europeos a las aguas británicas.
El mismo documento, según el borrador, supedita la posible prórroga del período transitorio de salida a que Reino Unido respete unos mínimos estándares europeos en materia como fiscalidad, medioambiente o empleo. Pero España considera que ese formato no es el adecuado para una reivindicación tan vital para los intereses nacionales como es la situación del Peñón.
Gibraltar es el último escollo pendiente en la cumbre del próximo domingo, en la que se espera sellar el acuerdo para consumar el Brexit el 29 de marzo de 2019. El resto de obstáculos (reclamación sobre cuotas de pesca en aguas británicas y clarificación sobre el período transitorio) se han resuelto en la mañana de este viernes.
El conato de solución lograda en la mañana del viernes incluía una declaración pública por parte de Londres confirmando que compartía la interpretación europea del artículo 184 del Tratado de salida. El Gobierno de Pedro Sánchez temía que ese artículo condicionase en el futuro la relación entre la UE y Gibraltar, sin respetar el derecho de veto que se había reconocido a España en las directrices de negociación sobre el Brexit. No ha habido, de momento, reacciones oficiales desde Londres.
El PP apoya al Gobierno con Gibraltar
El líder del PP, Pablo Casado, se ha referido en Almería a la intención del Gobierno de votar no al acuerdo del Brexit si no se resuelve el problema de Gibraltar. El líder del PP, que no ha hablado con Pedro Sánchez de esta cuestión, según fuentes del partido, apoyará al presidente del Ejecutivo en el veto a “cualquier acuerdo que sea deshonroso” para España en relación a Gibraltar.
Así lo ha expresado en Almería, donde también ha aprovechado para criticar la gestión del Gobierno en este asunto. "Actúan tarde y mal, haciendo el ridículo”." Yo no seré el socio europeo más simpático, no estamos para ser simpáticos, sino para servir a España", añadió.