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El jugador del Madrid podría ser suspendido entre cuatro y 12 partidos si el Comité considera sus gestos como una provocación animosa al público Bale celebra su gol ante el Atlético. GABRIEL BOUYS AFP
La presencia de Gareth Bale en los próximos compromisos ligueros del Real Madrid está en suspenso. La Liga de Fútbol Profesional (LFP) ha denunciado ante el Comité de Competición de la Federación la celebración que realizó el atacante galés en el derbi ante el Atlético el pasado sábado y el jugador se expone a una sanción de hasta 12 partidos si se considera su gesto como una provocación animosa al público. Bale podría perderse, entre otros compromisos, el duelo frente al Barcelona del próximo 3 de marzo
"En el minuto 73 de partido, y tras anotar el jugador del Real Madrid CF, Gareth Bale, dorsal 11, el tercer gol de su equipo, en la celebración de este, siendo audible en la grabación audiovisual del partido algunos abucheos de parte de los aficionados locales, agita el brazo derecho llevándoselo a la proximidad de su cabeza, en previsible signo de provocación animosa al público, efectuando posteriormente un ademán de posible significado obsceno y despectivo levantando el brazo doblado y golpeándose en la mitad de él con la otra mano", describe en el comunicado el organismo que preside Javier Tebas.
LaLiga advierte que los gestos que realizó Bale, entre ellos una aparente peineta, están "entre las actuaciones prohibidas y sancionadas" por el Código Disciplinario de la RFEF y recuerda que dicho organismo "castiga "las conductas que atentan contra la dignidad y decoro deportivos, las contrarias al buen orden deportivo; y de modo concreto, las provocaciones al público" tanto para los casos en que se provoque o no "animosidad en el público".
Por ello, el organismo sugiere que el jugador sea sancionado atendiendo a diferentes artículos del mencionado Código Disciplinario. "El CD de la RFEF tipifica, de modo general, las conductas que atentan contra la dignidad y decoro deportivos (en su artículo 89) y las contrarias al buen orden deportivo (en sus artículos 100 y 122); y de modo concreto, las provocaciones al público, en sus artículos 93 -para los casos en que se provoque animosidad en el público- y 121 -para los casos en que no se consiga provocar esa animadversión", describe LaLiga.
El castigo queda a la espera de que el Comité estime que la celebración y los gestos de Bale fueran una provocación al público. Si así lo decide, el galés sería suspendido entre uno y 12 encuentros, en función de que cómo se valore su provocación. En caso de que considerara que a provocación obtenga el propósito perseguido de provocar la animosidad del público, la sanción iría de cuatro a 12 partidos; si no se obtiene la animosidad del público, la suspensión será de uno a tres partidos o por tiempo de hasta un mes.
En caso de no considerarlo así, dice LaLiga, Comité tendrá que dilucidar si la celebración denunciada constituye, en cualquier caso, una conducta que atenta contra la dignidad y decoro deportivos o que es contraria al buen orden deportivo, en los términos previstos en los artículos 89, 100 y 122 del CD de la RFEF.