Inditex volvió a batir sus marcas en 2018, pero lo hizo con el menor incremento de ventas de su historia. El gigante textil gallego, dueño de Zara, Massimo Dutti o Pull & Bear, superó por primera vez los 26.000 millones de euros en ventas, hasta un total de 26.145, un 3% más que en el ejercicio de 2017, según ha informado la empresa a través de un hecho relevante enviado a la CNMV. Sin embargo, es la tasa más baja de crecimiento de las ventas al menos desde que, en 1998, la empresa registró resultados antes de salir a Bolsa. El beneficio alcanzó los 3.444 millones de euros, un 2% más de los 3.368 millones registrados en 2017, también lejos de las tasas de los últimos años. Sin ir más lejos, el beneficio de la cadena creció un 6,7% en 2017 respecto al año precedente. La empresa achaca al efecto divisa la reducción del crecimiento en ventas y beneficios.
El año 2018 fue irregular para Inditex. Empezó realmente flojo, con una subida de apenas el 1,5% en ventas, lastradas, afirmó la empresa, por un efecto divisa muy negativo. Aceleró en el segundo cuarto del año, con un aumento del 4,4% (3% acumulado en el semestre), pese a que las divisas también pesaron en las cuentas. En el tercero, pese a que el presidente de la empresa, Pablo Isla, pronosticó un nuevo acelerón, la tasa de crecimiento volvió a caer por debajo del 2%, dejando la media a esas alturas del año en el 2,6%. Muy lejos de los aumentos de doble dígito o casi marcados en cada trimestre de 2015 a 2017.
En el cuarto, tradicionalmente el más fuerte en ventas para la empresa —abarca noviembre, diciembre y enero— el negocio volvió a estirarse, con un aumento del 4,5%, hasta alcanzar los 7.708 millones. En el acumulado del año, la cifra de ventas se va a 26.145 millones, un 3,2% más, una tasa de crecimiento desconocida para la cadena de Amancio Ortega. Hay que remontarse al ejercicio 2013, con una subida del 4,3%, para ver unos números apenas similares, pero aquel fue uno de los años más duros de la crisis económica en España. Para 2019, Inditex augura un crecimiento de entre el 4 y el 6% de las ventas comparables, frente en línea con el 4% registrado en 2018.
Afirma la empresa que el efecto divisa ha restado cuatro puntos al crecimiento de las ventas, que se habría situado en el 7% de no haber sido por motivos cambiarios. También este efecto ha lastrado pesadamente los beneficios, que se habrían disparado un 12% de haber permanecido constante el cambio. Así, Marcos López, director de Mercado de Capitales en Inditex, ha subrayado el "fuerte desempeño operativo" de la empresa en 2018, destacando que las ventas a tipo constante habrían crecido un 7%, y "han sido positivas en tiendas y online, así como en todos los conceptos y áreas geográficas".
Los vaivenes registrados a lo largo del año lastraron la acción del gigante textil, que se dejó más de un 20% en Bolsa en 2018. No obstante, las buenas perspectivas han vuelto en 2019, merced a un efecto divisa ya atenuado, por lo que recupera un 18% en el parqué desde que comenzó el año.
Aunque el gigante gallego reitera que su stock integrado hace que no tenga sentido distinguir las ventas online de las registradas en tienda, Inditex informa en la nota de que las ventas por internet crecieron en 2018 un 27%, hasta los 3.200 millones de euros, lo que supone un 12% de las ventas de la cadena, un 14% de promedio en aquellos países que disponen de tienda online propia. Zara, que ya vende en 106 países, prevé vender online en 10 más en 2019.
No obstante, la red de tiendas siguió creciendo, aunque también al menor ritmo histórico. La cadena cerró el año con 7.490 tiendas, apenas 15 más que un año antes. Para este año, la empresa prevé 50 aperturas netas, con 300 inauguraciones y 250 "asbsorciones" (cierres). No obstante, la empresa prefiere hablar de superficie comercial, puesto que su tendencia es desde hace algunos años cerrar las tiendas menos rentables y concentrarlas en grandes locales flagship, más grandes y situadas en lugares más señeros y con más capacidad de almacén para atender la venta online. Según Inditex, durante 2018 su superficie comercial aumentó un 4,7%, hasta rozar los cinco millones de metros cuadrados entre todas sus marcas (Zara, con 3,2 millones, Pull % Bear, Massimo Dutti, Bershka, Stradivarius, Oysho y Üterque) y crecerá un 5% en 2019.La inversión superó los 1.600 millones de euros, mientras que augura 1.400 para 2019.
La empresa ha decidido este año unificar las cuentas de Zara y Zara Home para "maximizar el impacto operacional y de gestión de la marca" y va a vender productos de Zara Home en la tienda online de Zara a partir del próximo otoño.
El espacio de venta le va a generar este año una nueva carga sobre las cuentas. Anuncia la empresa que durante 2019 comenzará a aplicar la nueva normativa contable NIIF 16, que obliga a consignar en el balance los alquileres, régimen en el que tiene la mayoría de sus tiendas. Afirma Inditex que esta normativa "no tendrá ningún impacto" ni sobre el negocio ni sobre el flujo de caja, pero "resultará en un incremento de entre 2% y 4% en el beneficio neto de 2019", y "un pasivo por arrendamientos de entre 6.500 y 6.900 millones de euros".
Más dividendo
La empresa ha anunciado que el consejo propondrá a la próxima junta de accionistas un aumento del dividendo ordinario del 50 al 60% del beneficio, además de un dividendo extraordinario de un euro por acción con cargo a los beneficios de 2018, 2019 y 2020. Así, para las cuentas recién cerradas, los accionistas recibirán 0,88 euros por acción en concepto de dividendo, un incremento del 17%.